La celebración llegó hasta bien entrada la madrugada y acudieron numerosas celebridades de los Países Bajos, pero como trasfondo se encontraba la intención de hacer cambiar de parecer a Cruyff sobre su retiro. Terminada la temporada los hijos de Nigel Doughty comienza a buscar un comprador para el club, ya que ellos no quieren continuar con el club tras la muerte de su padre. En los dos últimos meses de competición el equipo logra remontar el vuelo y logra la salvación.